Cómo imaginaban los soviéticos de 1960 el año 2017, centenario de la Revolución Rusa
El idílico relato que vaticinaba un glorioso futuro a la URSS del siglo XXI
Hoy, 7 de noviembre de 2017 se conmemora el centenario de la Revolución Rusa.
La llamada Revolución de Octubre (25 de octubre del calendario juliano) ocurrida el 7 de noviembre del calendario gregoriano, se debe a que antes de la revolución, el calendario vigente en el Imperio Ruso era dicho calendario juliano abolido por el posterior Gobierno bolchevique. En el resto del mundo bajo el calendario gregoriano, los sucesos se iniciaron el día 7 de noviembre de 1917.
Si quieres saber más sobre estos dos calendarios y sus cálculos, visita el artículo de este blog → Feliz Navidad!… Gregoriana.
En 1960 se publicó en la Unión Soviética la tira de imágenes «En el año 2017», una historia de ficción que se desarrolla en lo que hoy es el presente actual. En este escenario imaginario, la URSS lejos de desintegrarse, como realmente ocurrió en 1991, es más poderosa que nunca.
El argumento de esta película nos muestra desde el pasado a los hipotéticos soviéticos del futuro construyendo en este escenario fantástico trenes que cruzan el estrecho de Bering, represas capaz de detener las corrientes frías del Ártico, naves interestelares que viajan a Alfa-Centauri, estaciones meteorológicas voladoras y máquinas perforadoras alimentadas por energía de mesones capaces de crear espacios subterráneos para ciudades enteras que se mantienen en una eterna primavera gracias a un clima artificial. Mientras, los ‘imperialistas’ han sido vencidos y relegados a las lejanas islas del Pacífico.
En el desarrollo del argumento, una enorme tragedia se cierne sobre este idílico mundo: los imperialistas, desde su exilio en el Pacífico, han activado un arma prohibida que ha provocado una enorme explosión y amenaza a todo el planeta con tormentas y tornados devastadores. Sólo la determinación de los empleados de la estación de control climático, logrará enmendar la situación y salvar al planeta después de arriesgar sus vidas.
‘En el año 2017’ no es sólo una película futurista en la que la propaganda de la tecnología y la heroicidad de una sociedad avanzada comparten protagonismo; es también el reflejo de la fascinación que la tecnología despertaba en aquellos años inmersos en la carrera espacial por poner al primer ser humano en la Luna.
DIAFILM. Proyector década de 1960
El relato, escrito por V. Strukova y V. Schevchenko e ilustrado por L. Smekhov, fue publicado en 44 tiras de películas o diapositivas para Diafilm, una especie de proyector doméstico que se usaba en la décadas de los 60.
Vídeo de las imágenes en el canal de Youtube de este blog: Vientos del Este.
En enero de este año, la olvidada tira de imágenesvolvió a ver la luz al difundirse por internet después de que Sergei Pozdnyakov las encontrara reorganizando sus colecciones familiares y compartiera en su cuenta de Vkontakte convirtiéndose rápidamente en publicación viral.
Esta es la colección completa de diapositivas publicadas por Sergei Pozdnyakov.
Agradecimientos a Roger Veseliy por la traducción al español para este blog.
1. V.Strukova y V.Shevchenko «En 2017» Ilustrador: L.Smekhov Producción: Estudios Diafilm, 19602. ¿A quién no le agita la cuestión del futuro? ¿Cómo es? ¿A quién no le gustaría echar un vistazo al próximo siglo? Leyendo libros de ciencia ficción, conociendo las cuentas de los científicos y los proyectos atrevidos de ingeniería, puede uno dibujar las imágenes del futuro.3. Así, echemos una ojeada al futuro. Trasladémonos 50-60 años adelante. Puede ser que en la víspera del centenario del Gran Octubre unos escolares semejantes como vosotros en la clase de geografía mirarán un panorama de cine del pasado reciente y el presente de su país, una película de cómo el pueblo soviético reforma la naturaleza por la paz y la prosperidad en la Tierra.4. Aquí están los escolares del 2017 en una clase de proyección. Una técnica especial de cine: la lupa del tiempo, les permite observar cómo se creaba el nuevo aspecto del país.5. Los muchachos han visto cómo se extendían los vanos de un puente sobre desfiladeros abismales…6. …cómo las explosiones atómicas dirigidas con precisión cortaban colinas innecesarias y cavaban canales.7. …cómo volvían hacía atrás el Obi y el Yeniséi y se dirigían al mar Caspio. Este mar recién secado ahora acogía nuevos ríos caudalosos.8. Los chicos escuchan la voz del locutor: – Y aquí está la presa sobre el estrecho de Bering. ¿Veis como corren trenes atómicos por encima de ella? La presa cortó el paso de la corriente fría del océano Ártico y el clima del Extremo Oriente mejoró. –9. Luego el terreno como si se derritiera, se podía ver lo que pasaba en el subsuelo. En el fondo de los volcanes unas naves-topos de acero especial pirorresistente excavaban minas hacía las fuentes de energía eterna.10. Después desapareció también la Tierra. En el espacio las naves interestelares viajaban a la velocidad de la luz dirigidas hacia el sistema planetario más cercano pero a la vez lejano, Alfa-Centauri.11. Cuando la sesión de cine se había terminado el profesor de geografía Nikolay Borisovich recordó que al día siguiente la clase iba a una excursión a la ciudad subterránea de Uglegrad situada en el sub ártico.12. Al día siguiente Ígor se despertó de un manotazo. De esta forma le despertaba su reloj de pared, construido en broma por su padre, uno de los controladores del Instituto central de meteorología.13. Entornando los ojos el muchacho vio cómo una mano de plástico blando que acababa de despertarlo se metió de nuevo dentro del reloj. – ¡Hoy veré Uglegrad con mis propios ojos! – Pensó alegremente Igor.14. La madre no estaba en la cocina, pero le había dejado una nota-tarea para una máquina culinaria inteligente. – ¡Mi desayuno favorito! se alegró el chico.15. Igor arrancó cuidadosamente el aparato y echó la papeleta en una hendidura. Realizando la tarea, unos rayos invisibles tocaban el contorno de las letras, cucharas automáticas dosificaban lo que hacía falta y los cuchillos especiales cortaban rápidamente la hortaliza.16. De repente desde el despacho del padre se escuchó la voz sonora de la madre.17. La madre miraba desde la pantalla del videoteléfono. Estaba de pie en la cubierta de la motonave. Allí se había colocado un jardín de infancia donde estaban sus hijos menores. ¿Lo has logrado con el desayuno? le preguntó la mamá sonriendo.18. ¡¿Estás… en el Mar Negro?! se sorprendió Igor. Estoy en comisión de servicio. Reviso los jardines de infancia flotantes del Mar Negro, y de paso visito a los míos… – Dile a papá por teléfono que vuelvo mañana. –19. En media hora Igor estaba ya lejos de Moscú. El Ártico recibió a los visitantes con una ventisca feroz y fueron recibidos por los trabajadores locales.20. Ante los excursionistas se abrió la escotilla y la cinta ancha de una escalera mecánica los llevó abajo.21. Luego todos ellos iban por las calles de Uglegrad. En el aire se esparcía la fragancia delicada del tilo. Viendo la gente tomando el sol en la playa bajo un astro de cuarzo, era difícil creer que arriba se enfurecía una ventisca.22. Mientras tanto en las afueras, las enormes máquinas perforadoras de acero molían la roca. Vladislav Ivanovich, el ingeniero jefe de Uglegrad, le explicó a los escolares una gran cantidad de cosas interesantes.23. Tenemos aquí bajo la tierra la eterna primavera contaba orgullosamente , pero he aquí que el caprichoso tiempo de arriba nos frustra el gráfico de envío de la producción.24. ¿Y la estación meteorológica voladora en construcción no podría soportar los caprichos del clima ártico? Preguntó Nikolai Borisovich. Los niños esperaban con interés la respuesta del ingeniero jefe.25. Por ahora la función de la estación voladora es de carácter temporal respondió Vladislav Ivanovich , Y crear las condiciones para un flujo continuo de carga lo puede hacer únicamente el metro interurbano a través de todo el Ártico.26. Aquí está el nuevo modelo de perforadora: una máquina de perforación de alta velocidad. Esta perforadora trabajará en la recién descubierta energía de mesón, lo que aumentará la velocidad de penetración al triple.27. Y la estación voladora de control meteorológico tiene un gran futuro. El hombre estará en un despacho presionando botones del mando por radio y la maquina volará y pacificará el huracán, aniquilará la tormenta.28. Y muy pronto los escolares supieron lo que era capaz hacer la estación voladora… En el mismo momento cuando Vladislav Ivanovich hablaba con ellos en su oficina, en el Instituto Central de Meteorología en Moscú, el jefe de previsión del país y un controlador del turno, el padre de Igor Evgueni Sergeevich, discutían los informes de emergencia recibidos del Pacífico.29. – Acaban de informar – dijo el jefe de previsión –, que los últimos imperialistas escondidos en una remota isla han realizado pruebas con armas prohibidas de mesón. Durante la prueba tuvo lugar una explosión de fuerza sin precedentes que destruyó toda la isla y simultáneamente causó perturbaciones en la atmósfera del planeta.30. – He aquí el por qué nuestra máquina inteligente de previsión hoy de repente dió tormenta en 12 puntos en el Mar Negro, aunque las previsiones de ayer fueron favorables! –, Exclamó Yevgeny Sergeyevich.31. – La explosión en el Pacífico del Sur llevará tormentas y tempestades terribles. Tenemos que salvar la gente urgentemente! –, dijo el jefe de previsión decididamente – ¿Nuestra estación voladora está lista?32. Una idea terrible quemó la mente de Evgeny Sergeevich. Naves… jardines de infancia flotantes… Y Allí esta su mujer, Nina, Vitya. El huracán está cada minuto más cerca. Y la estación aún no está equipada con el control de radio.33. Vamos a pedir permiso para el despegue de la estación meteorológica con el personal a bordo – dijo el jefe de previsión–. Volamos nosotros mismos. Por supuesto, arriesgamos nuestras vidas. Pero debemos salvar a los niños, marineros y barcos.34. El permiso para el despegue fue recibido. Y he aquí que detrás de la ventana de la estación meteorológica voladora pasan corriendo unas columnas altísimas de agua. Esas llegan hasta las mismas nubes.35. La costa del Mar Negro brilló en la pantalla del televisor instalado en la estación. Una columna enorme de tornado se llevaba los tejados de las casas y arrancaba árboles centenarios.36. El jefe de previsión bajó el cristal negro sobre las ventanas. El laboratorio fue supervisado por los técnicos. Los ojos cortados por el fuego incluso a través de cristal negro… Después de todo, la estación emitió mesones de energías sin precedentes. La radiación luchó con un tornado.37. Cuando al final apagaron los rayos de mesones y los cristales negros ya estaban levantados, el tornado desapareció como por el arte de magia. La estación voladora de control meteorológico salvó a cientos de personas.38. La explosión en el Pacífico Sur amenazaba con peligro mortal la costa del Mar Negro, y se hizo sentir en la capital. Un limo impenetrable gris se arrastraba por el cielo opaco.39. Pero la capital se preparaba para la fiesta. En las calles se sentía una animación insólita. Los moscovitas se arrebataban unos a otros los periódicos del día con los informes de los últimos éxitos de la ciencia soviética en la gestión del tiempo.40. Y de repente las nubes se abrieron y las columnas de luz dorada cayeron inclinadas en las casas y los parques. Un corredor de luz se iba expandiendo.41. Por encima de la ciudad pasaba lentamente la estación voladora de control meteorológico. La capital exultada, se preparaba para la celebración del centenario del Gran Octubre. Este festejo coincidió con el gran triunfo de la ciencia soviética sobre la naturaleza.42. Cuando el padre de Ígor salió de la estación meteorológica voladora, el hijo no fue capaz de escaparse de sus abrazos esta vez especialmente fuertes.43. Por la noche, Evgeniy Sergeyevich puso el videoteléfono y llamó a la motonave Kajetia. Desde la pantalla le sonreía su mujer y Nina estaba a su lado y gritaba: – ¡Papá, hemos tenido una lluvia tan, tan templada! –44. FIN. Editor: E. Kavtiashwili Editor artístico: A. Morozov Fabrica: “Diafilm” Moscú, Centro, callejón Starosadski, №7