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- .Massandra (Масcандра)
- Nikita (Никита)
- Gurzuf (Гурзуф)
- Alushta (Алушта)
- Novyi Svet (Новый Свет)
- Sudak (Судак)
- Koktebel (Коктевель)
- Feodosia (Феодосия)
- Katsiveli (Кацівелі) Página
- Ai-Petri (Ай-Петри) Página
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Los textos en este color abren los planos para ver los accesos a los lugares.
Massandra – (Масcандра)
El Palacio de Massandra fue también mandado construir en 1881 por el príncipe Vorontsov, que murió al año siguiente, paralizándose las obras durante ocho años, hasta que los terrenos son comprados por el zar Alejandro III que reanuda las obras que terminarían en 1900. El zar murió antes de ver Massandra acabado. Su hijo el zar Nicolás II fundaría en Massandra una bodega que con el tiempo destacaría por la calidad de sus vinos así como su sorprendente historia. Durante la época soviética fue la dacha de verano de Stalin. Hoy día Massandra vuelve a ser conocido por sus apreciados vinos blancos y dulces.
Palacio de Massandra
La fascinante historia de sus vinos merece dos reseñas de los artículos publicados en la página digital del periódico El Mundo. (elmundovino.com) en 2004 y 2005.
Extracto de: Massandra: Sobrevivir al comunismo por Olga Nedbaeva ©
En las bodegas de Masandra, en Crimea, fundadas por el último zar Nicolás II, están cuidadosamente colocadas un millón de botellas, cubiertas por un polvo secular, que han atravesado los tiempos, sobreviviendo tanto a las guerras como a las campañas de prohibición de la época soviética.
«En las grandes recepciones, ofrecemos a los invitados marcas de vinos de su año de nacimiento», explica Egorov, que trabaja en las bodegas desde 1956. Recuerda, por ejemplo, la visita de Yuri Gagarin, el primer cosmonauta ruso y el primer hombre que viajó al espacio. O la del astronauta americano Neil Armstrong. O la de los dirigentes de la URSS y del presidente Putin
Hoy, Masandra figura en el libro Guinness de los récords por su bodega. Y no sólo contiene sus vinos: un jerez de 1775, regalado entonces a los príncipes rusos, fue vendido en una subasta de Sotheby’s, en 2001, por 50.000 dólares….
Fecha de publicación: 28.07.2004
Extracto de: Massandra, una historia fascinante por Luis Gutiérrez ©
Una bodega para los zares
El pionero absoluto en la zona fue un tal Mijáil Vorontsov, quien importó y plantó multitud de castas viníferas, y comenzó la producción de vino. En 1894, impulsado por el éxito de Vorontsov, el zar Nicolás II decidió construirse su propia bodega: Massandra. El propio Zar nombró al príncipe Lev Sergervich Golitzin responsable de la producción de sus vinos, con objeto de conseguir la más alta calidad posible. Golitzin parecía tener un talento especial para las mezclas, aunque era poco aficionado a documentar sus ‘inventos’, algunos de los cuales se llevó consigo a la tumba, y algunos de los vinos son todavía hoy un auténtico misterio.
Massandra era pues la bodega encargada de suministrar vinos al palacio de Livadia, residencia de verano de los Zares de Rusia en Crimea. No se trataba de una bodega de elaboración, sino de embotellado, crianza y almacenaje, ya que el vino se elaboraba en unas 25 bodegas situadas en los alrededores. En ella se almacenaban mayoritariamente vinos locales, pero también algunos vinos ‘de importación’ de algunas de las zonas más prestigiosas del mundo.
Además de producir vinos ‘locales’, tanto tranquilos blancos y tintos como espumosos, también se imitaba el estilo de grandes vinos dulces y fortificados del mundo… …Lo curioso de todo esto es que algunas de las imitaciones superaban incluso a los productos originales, como es el caso, según se asegura, de los ‘oportos’ blancos
Tras la revolución rusa, durante la cual las entradas a los túneles que componían la bodega fueron sellados y camuflados de manera que pasaran desapercibidos, fue redescubierta por las tropas de Stalin, quien, impresionado por la calidad de los vinos allí almacenados, decidió no sólo no destruirlos, sino aumentar la colección con botellas provenientes de los palacios de los zares en Moscú y San Petersburgo, y continuar la producción que ha seguido hasta nuestros días.
La histórica colección de vinos que todavía sigue engordando al ritmo de unas 10.000 botellas al año, fue evacuada durante la ocupación alemana en la segunda guerra mundial, cada botella numerada y llevada a una de las tres localizaciones secretas (alguna tan lejos como Georgia), para protegerlas de los nazis. La única baja de la operación fue la añada 1941, que se encontraba todavía en los depósitos, que por tanto no pudo ser trasladada y se vertió al mar negro. La colección fue finalmente restaurada a su lugar de origen en 1945. El stock estimado de la bodega sobrepasa el millón de botellas de añadas que se remontan hasta 1775, y cuyo valor se calcula en unos 150 millones de dólares.
Fecha de publicación: 07.01.2005
Para visitar el Palacio de Massandra debes dejar el coche (ruta amarilla) en un pequeño aparcamiento cercano para continuar a pie unos 800m por un camino asfaltado con pendiente ascendente. (Ruta ciano)
Acceso a pie al palacio de Massandra
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Nikita – (Никита)
A solo cuatro km al Este del centro de Yalta y muy cerca del palacio de Massandra se encuentra el jardín botánico de Nikita. Si el día permanece soleado es un buen sitio para parar unas cuantas horas y pasear por este pintoresco jardín botánico fundado en 1812 por el botánico ruso de ascendencia sueca Christian Steven y construido sobre la ladera de fuerte pendiente que siempre está presente en todo nuestro trayecto desde Foros. La colección de especies presentes en este jardín se eleva a más de 50.000 y en su parte sur, después de haber descendido toda su ladera, se comunica con la zona de playas.
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Acceso al Jardín Botánico de Nikita
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Gurzuf – (Гурзуф)
Se encuentra a unos 8 kilómetros del jardín botánico de Nikita. En todas estas rutas donde el lugar de visita está en línea de costa es aconsejable ascender directamente a la carretera general y continuar por ella hasta la salida correspondiente, para volver a descender hasta llegar al lugar elegido. Intentar buscar una ruta alternativa paralela a la costa es arriesgado dado lo accidentado del terreno y lo sinuoso del trazado, lo que llevaría con toda seguridad a perderse en el laberinto de vías y calles, a menos que dispongamos de GPS. Pero a día de hoy los únicos mapas de detalle disponibles son de software ruso como los de la compañía Transnavicom. Cómo echo de menos en estos viajes mi gps !
De Nikita a Gurzuf. (En color destacado, el tramo de Ctra. General)
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Gurzuf se encuentra situado justo antes del monte Ayu-Dag. Impresionante macizo rocoso a pie de costa visible desde varios kilómetros que por su forma recuerda a un oso descansando. De ahí su nombre que traducido es Montaña-Oso. A pie de costa puedes hacer una breve visita a la dacha de Anton Chejov, médico y célebre escritor ruso de finales del s.XIX, considerado uno de los más importantes escritores de cuentos de la historia de la literatura. Las vistas desde la playa de los cercanos islotes Adalari a los que se puede llegar a nado es uno de los reclamos de la zona.
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A unos 20 km de Gurzuf se encuentra la ciudad de Alushta.
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Alushta – (Алушта)
Fundada por el emperador Justiniano en el siglo VI, no queda casi ningún vestigio de la época salvo una torre de defensa aislada y restos de una posterior fortaleza genovesa. La ciudad no tiene nada especial de interés por lo que podemos situarla como lugar de paso, a menos que te estés moviendo en bus, por lo que tendrás que parar sin remedio al ser final de trayecto de línea. Si quieres continuar hacia Sudak en este medio, lo vas a tener difícil a partir de Alushta.
A nueve km de Alushta está el desvío dirección norte a las montañas Demerdji. Una vez tomado el desvío, continuando un poco más de cinco km y dejando atrás el pueblo de Luchyste, se encuentra en el margen derecho el inicio de un carril hacia la zona de este macizo. No tengo información de hasta donde es transitable este carril y en qué punto hay que continuar la ascensión a pie. En este próximo viaje es uno de los puntos que quiero visitar, por lo que de ser así, a la vuelta daría más información sobre este paraje. Pero lo que sí puedo adelantar es que la caminata es exigente y desde el principio del carril hay casi seis km con un desnivel de en torno a 800m, lo que nos da casi el 14% de pendiente media. Esto no sería significativo ni no fuera porque el trayecto es largo. Por eso es importante saber qué longitud transitable tiene hoy día el carril.
Desde Alushta hasta el siguiente destino hay un salto importante, ya que 82 km de “tierra de nadie” nos separa de Sudak para tener que girar 8 km hacia el Oeste si queremos llegar a Novyi Svet, ya que esta encantadora aldea no tiene otra conexión de entrada posible.
No quiero con esto apuntar que en el trayecto no existan sitios dignos de visitar. No lo puedo asegurar pues desconozco gran parte de la costa desde Alushta a Novyi Svet, salvo alguna pequeña parada para investigar como en el caso de la aldea de Malorechenskoye con su curiosa iglesia marinera.
https://goo.gl/maps/dLe7biMw54Xh9feo6
En mi caso no logré encontrar más sitios destacables, entre otros motivos por las características del trayecto. Me explico: A partir de Alushta la fisonomía de la carretera y el entorno cambia drásticamente. Tanto que aconsejo hacer los más de 80 km antes de que caiga la noche, ya que la calzada aparte de ser más estrecha y en peores condiciones, está saturada de curvas, muchas de ellas cerradas sin visibilidad y con continuos cambio de rasante, lo que lleva a mantener un promedio de no más de 55-60 km/h. Tómalo con calma. No se trata de buscar el límite del coche que conduces. No merece la pena. Recuerda lo que comenté al principio de la manera de conducir de los crimeos y los agujeros-trampa del asfalto. Para colmo el trayecto como dije antes es una especie de “tierra de nadie”. Pasan los kilómetros y no ves ni una casa, ni pozo ni nada que te recuerde a la civilización. Sí, suena bucólico, mientras no tengas una avería, pinchazo o incidente a causa de los baches. Si algo de esto te sucede y esperas que el próximo coche que pase te socorra, puede pasar un buen rato hasta que logres ver pasar al primero.
La primera vez que hice este recorrido fue en mi primer viaje. Fuimos de Sudak a Yalta en ferry y al volver, fuimos en bus hasta Alushta, donde descubrimos la limitada y esporádica conexión con Sudak por este medio, y siendo avanzada la tarde solo pudimos contratar lo más parecido a un taxi que hizo gran parte del recorrido de noche. Resultó interminable y no alcanzaba a comprender como pasaban los kilómetros y no nos cruzábamos con nada ni nadie y por la ventanilla ni señal de luces que indicaran algún sitio habitado. Mientras pensaba: …“Y cuando lleguemos, …este tío tiene que volver a Alushta??” Fue todo un poco surrealista, lo que me llevó a tomar precauciones al año siguiente cuando tuve que repetir el trayecto, esta vez con vehículo de alquiler y por descontado con luz de día. Por cierto, como curiosidad, apuntar que el ferry tardó menos en el mismo trayecto que el coche a la vuelta, y eso que el conductor parecía conocer de memoria la carretera.
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Novyi Svet – (Новый Свет)
A este pequeño y encantador pueblecito se llega a entrando en Sudak por el Norte y saliendo por el Suroeste. No hay otra vía de acceso como puede verse en la imagen.
Acceso a Noviy Svet desde Sudak
Novyi Svet cuya traducción es “Nuevo Mundo” se encuentra en un enclave privilegiado formado por una bahía rematada en sus extremos por dos montes: Sokol (Halcón) al Este y Koba-Kaia al Oeste.
Es célebre en toda Ucrania por sus vinos espumosos y achampanados. Los viñedos los introduce en el s.XIX el príncipe Lev Golitzin, encargado también de la producción de Massandra. Las bodegas, horadadas en la roca están compuestas de varias galerías llegando a medir más de 2 km de longitud total. Es posible visitar sus instalaciones concertando una visita en la que aparte de conocer sus bodegas y el proceso de elaboración, ofrece una degustación de cinco de sus productos más destacados.
Aconsejo ir con algo en el estómago, si no quieres terminar arrastrándote hasta la playa para despejarte y dormir una buena siesta. Lo digo por experiencia. La degustación como he dicho consta de cinco copas de caldos distintos, y todas hasta arriba. …El problema es que están tan buenos, que las vas apurando sin dejar ni gota. Lo demás, ya se sabe: espumosos y mezclando diferentes graduaciones y azúcares, solo tiene un final conocido, …pero feliz.
Con la visita a la bodega descubrimos que tiene un acceso a la altura del paseo marítimo en su tramo final en donde han instalado una pequeña tienda en la cual puedes comprar desde cajas enteras, pasando por botellas individuales hasta un simple vaso para consumir en el acto. Para más de uno, todo un peligro saber que tiene a tiro la tienda-bar de la bodega casi sin moverse de la playa.
El paseo marítimo es coqueto y agradable para caminar sin prisas. Rematado cada cierta distancia con llamativos chiringuitos bien montados que se adentran en la playa sobre palafitos, ofreciendo un lugar de descanso temporal donde tomar una buena cerveza fría con pistachos (turcos y uzbekos) … esos sí son pistachos de verdad, o una de sus múltiples ensalada y helados, hasta cenar a la carta toda clase de platos, siempre acompañado con unas bonitas vistas al atardecer. Pequeños jardines a modo de bulevar adornan el paseo y un diminuto parque infantil con desgastadas maquinarias superviviente de la época soviética parece retar al tiempo presente mientras duermen añorando el pasado de un tiempo que se suponía mejor, dando un toque melancólico al recorrido. Al final del paseo se encuentra un restaurante de cocina tártara donde podemos degustar una variada carta de carnes de cordero, ternera, pollo e incluso cerdo, todas ellas altamente condimentadas como es tradicional en este tipo de cocina, acompañado de un buen vino tinto de Novy Svet, Massandra o Inkerman.
Si no tienes mucho tiempo, en cualquier pequeño puesto ambulante (muy numerosos en Sudak), podemos degustar dos típicos productos muy demandados: El Shashlik y el Shaurmá.
Novyi Svet es también conocido por su reserva natural de sabinas emplazada al norte del monte Koba-Kaia. Hay que atravesar dicho parque para dirigirse a las playas que bañan el cabo Capchik de caprichoso contorno.
Cabo Kapchik
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Capitán Flint y el cabo Kapchik
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Reserva Natural de sabinas
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En el margen oeste del cabo se encuentra la playa del Zar de aguas tranquilas y al resguardo del viento, que por otro lado salvo días señalados nunca sopla con fuerza, siendo en su lugar una suave brisa casi constante. Mas allá de la playa del Zar se encuentra el pico Karaul-Oba. A partir de aquí la costa se hace cada vez más inaccesible. Todos estos lugares tienen acceso por el mismo parque que forma la reserva natural. Siendo el itinerario hasta Karaul-Oba uno de los mas variados e interesantes.
A mitad de camino a este pico hay que pasar por una gran roca con una hendidura vertical de unos 15 m de alto que la han bautizado con el nombre de “El refrigerador”. La gente para aquí para refrescarse, pues aunque parezca arte de magia, de la hendidura fluye un aire casi helado. Según dicen es a una temperatura constante de 8º, pero si el día es de los que te toca ir a 36º- 38º (muy normal en Julio y Agosto), la sensación es que te congelas. Por la abertura cabe una persona con facilidad, pero parece ser que nadie por ahora se atrevió a adentrarse más de unos cuantos metros, debido a que se estrecha mucho y claro está por la temperatura e intensidad de la corriente.
Otra recorrido interesante es la subida al monte Koba-Kaia. Desde el lado Norte, este promontorio volcánico presenta una suave pendiente fácil de recorrer.
Monte Koba-Kaya y bahía de Novyi Svet
Conforme te vas acercando a la parte más alta, el terreno se va inclinando a ambos lados hasta formar una arista de paredes casi verticales, sobre todo en su lado Oeste. Es a partir de ahí donde deberás sopesar el riesgo de seguir adelante. En días de viento sobre todo si viene del Este no aconsejo seguir, y mucho menos a los que sufren de vértigo, pues llegado el momento puede ser un tanto peligroso. Si te decides a seguir un poco más tendrás tu recompensa. Un paisaje de 360º único se abre ante tus ojos. Podrás contemplar una vista completa de Noviy Svet, el cabo Kapchik, el monte Sokol y por supuesto, la inmensidad del Mar Negro.
Como consolación a los que no se atrevan a llegar al final, siempre queda la vista de Noviy Svet y Sokol desde algo más abajo sin necesidad de pasar malos ratos.
Remarcado en rojo, la zona que puede ser peligroso seguir avanzando
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Dejo para el final el itinerario hasta la cima del Monte Sokol.
Monte Sokol
Bien, si ves las imágenes del monte puede parecer “palabras mayores” lo de subir a este macizo. De hecho lo es si lo intentas por su cara Sur. Igual que Koba-Kaia por cualquiera de sus lados que no sea el Norte. Es más, a este monte vienen desde muchas partes alpinistas perfectamente preparados con sus utensilios de escalada para practicar.
Como ejemplo mira este blog: http://escalarencrimea.blogspot.com/ Pero bien, en nuestro caso creo que nadie somos de la pandilla de “Edurne Pasaban” y lo que queremos es pasar un día de caminata divertida y hacer algo de ejercicio sin más herramientas que un buen calzado, una mochila y una gorra, por lo que para esto tendrás que salir del pueblo y encaminarte por el valle al Norte del monte, hasta llegar a la cara Noreste, donde verás que es mucho más fácil la subida por la cornisa en dirección Noroeste. Aunque el perfil de ascenso parece más fácil que el de Koba-Kaia, éste solo son 90 m de altura, mientras que Sokol llega a los 500m. Por lo que la caminata es bastante más exigente.
A mitad de subida podrás divisar Sudak y casi todo el perímetro de su fortaleza genovesa. Una vez en la cima tendrás una magnífica vista de Noviy Svet, Koba-Kaia y Karaul-Oba. Aconsejo si vas a subir a este monte que empieces desde muy temprano (desde las cinco de la mañana tienes luz), aunque no hace falta que vayas despertando a las gallinas, pero si empiezas el recorrido tarde te encontrarás con dos inconvenientes: Exceso de calor y en la cima tendrás el paisaje a contra luz ya que las vistas son hacia el Oeste.
Podría seguir escribiendo páginas enteras sobre Novyi Svet. Para mí se trata de un lugar muy especial por diferentes motivos. Novyi Svet se puede traducir también como “Nueva Luz”. Luz en ruso es свет (svet). De ahí el nombre femenino de света (Sveta) que significa «Iluminada». De hecho mucha gente comenta que no tienen claro cuál de los dos puede ser el correcto. A mí me agrada más este segundo significado. Cada vez que he visitado este pueblecito me ha hecho ver la vida de una forma muy diferente a como estoy acostumbrado, lejos del ruido, las modernidades y la tecnología. Un lugar detenido en mucho de sus rincones en los años 60, conviviendo con el resto del presente de una forma natural y serena. Es la antítesis de Yalta. Si vas buscando lujo y comodidades, este no es tu sitio. Pero si quieres pasar unos días retirado de todo en un lugar donde existen tiendas en donde la suma de la compra la siguen haciendo con ábacos ancestrales, …bienvenido a Novyi Svet.
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Más imágenes de Novyi Svet en la pag. de este blog → Crimea. Cinco años después.
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Sudak– (Судак)
A unos siete kilómetros de Noviy Svet se encuentra la ciudad de Sudak de unos 20.000 habitantes. Es uno de los destinos turísticos preferidos por ucranianos y rusos después de la cosmopolita Yalta, y a un nivel parecido a Foros, Alupka y Alushta, aunque más dirigido a la gente joven que al turismo familiar de balneario. Sudak es bastante animado en la zona del paseo marítimo y puerto, de donde en verano salen ferrys con destino a casi cualquier punto de la costa. Innumerables restaurantes, bares y sitios de copas con música y ambiente animado concentrados en unos cientos de metros.
Caminando por su paseo marítimo encontrarás numerosos puestecillos de comida rápida cuya cocina es principalmente tártara, turca, uzbeka, georgiana, y armenia. Un sinfín de platos de sabor más que interesante aunque como siempre algo especiados. Los más populares y que recomiendo probar son dos:
El Shashlik es un plato ruso-asiático Existen muchas variantes de este asado marinado: una típica es con porciones de cerdo (para no musulmanes) cortada en cubos, tomates y cebolla bien cortada. Todo en un recipiente con pimienta y sal; se deja por lo menos 6 horas y se echa a la parrilla. Por cada kilo de carne se añade un kilo o más de tomates, y un kilo o más de cebolla. En Kirguistán le agregan a la marinada pan duro picado, para que resulte crujiente. La carne queda muy jugosa y con un sabor refrescante y atemperado. Otra marinada recomendada es con base de pollo, yogurt natural, cilantro y curry. Marinada entre 10 y 24 h. Se puede usar cualquier carne, y hacer variaciones interminables de ingredientes.
Shaurmá, shawarma en árabe es un sándwich de cordero, cabra, pollo, pavo, carne de res, o una mezcla de los mismos. La carne se coloca en un asador (shawarma) a gas o eléctrico y puede estar al calor durante todo un día. Es un alimento básico y rápido en todo el Oriente Medio, Europa y el Cáucaso. Aquí lo suelen presentar enrollado en un cilindro de pan de pita cerrado por un extremo y presentado en posición vertical a modo de vaso. Es casi idéntico en su preparación a lo que conocemos como Kebab, variando la presentación.
Shaurmá
Sudak es también conocida por su fortaleza genovesa del s. XIV.
Dicha fortaleza ocupa un total de casi 28 Ha. Y se halla en buen estado de conservación, pudiendo visitarse todo el año. La ciudad fue fundada en el s.III por comerciantes griegos de Bizancio. Cien años después los jázaros se hicieron con el control del puerto para volver a perderlo a manos de los bizantinos. En el s. XI los mongoles arrasan la ciudad y poco después se instalan venecianos que al poco ceden la ciudad a comerciantes genoveses, convirtiéndose un lugar obligado de paso en la famosa “ruta de la seda”. A mediados del s.XII. En 1475 los otomanos acaban con la supremacía comercial genovesa en la zona y terminan cediendo el territorio al Kanato de Crimea, terminando en manos del imperio ruso en 1.783 como el resto de la península.
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De Sudak salimos como siempre hacia el Este algo más de 30 Km. para dirigirnos a Koktebel
Koktebel– (Коктебель)
Su nombre en tártaro significa “Tierra de las colinas azules” y su población no llega a los 3.000 habitantes, aunque en verano sufre una invasión de turismo ucraniano y ruso. Las suaves colinas de los alrededores eran usadas por los rusos de finales del s.XIX y principios del s.XX para probar todo tipo de prototipos y artefactos voladores.
Koktebel es también conocido por su festival de Jazz a mediados de septiembre y es visita obligada de músicos de este estilo procedentes de todas las ex repúblicas soviéticas.
Entre el pueblo de Kurortnoye y la estación de esquí de Koktebel se encuentra la Reserva Natural de Kara-dag. La gente de Koktebel dicen que “es uno de esos lugares en los que, sea cual sea tu religión, se puede sentir la mano del Creador”. Este paisaje jurásico único es el resultado de un volcán extinto, que hace miles de años arrojó lava y los desechos al mar.Los elementos que han esculpido las rocas volcánicas en formas fantásticas y alberga la flora y la fauna única de esta parte de Crimea.
En mayo, las montañas de Kara-dag están alfombradas con flores silvestres, y los valles son de un verde exuberante y salpicado de árboles y arbustos de floración. Amatista, ónix, cornalina, jaspe, ágata y muchos otros cristales y minerales se pueden encontrar aquí, siendo las piedras semi-preciosas de esta zona muy apreciadas en todo el mundo. Hay abundante vida silvestre, y la ubicación en la costa hace que pueda verse todo tipo de aves marinas, tales como cormoranes, golondrinas de mar y gaviotas así como las águilas, cigüeñas, arrendajos, y muchos otros. Las montañas son el hogar de numerosas serpientes (no venenosas), y también de arañas. De éstas, sólo la viuda negra es venenosa.
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Kara-Dag fue declarado reserva nacional – en 1979, y desde entonces se han cuidado las medidas adoptadas para su protección. Hay un centro de visitantes con un museo de vida silvestre pequeña, y aquí se puede comprar un billete (unas 25 Grivnas) para una excursión guiada. Caminar de forma independientes no está permitido debido a los temores de los incendios y la erosión, y también porque el contenido de hierro en algunas de las montañas volcánicas es tan alto que genera un campo magnético que puede interferir las brújulas, por lo que un buen conocimiento de los caminos de montaña es esencial. En su lugar existe una caminata guiada de cuatro horas que te llevará hasta las partes más interesantes de la reserva con un guarda muy bien informado aunque es mejor tener un intérprete ya que por lo general no hablan inglés. Se trata de una experiencia única, e inolvidable.
A unos 20 km de Koktebel se encuentra la ciudad de Feodosia, último destino de nuestro recorrido por el litoral sur de Crimea.
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Feodosia– (Феодосия)
Teodosia, posteriormente Caffa y más tarde renombrada como Feososia por los rusos, fue una antigua ciudad griega, fundada en el s. VI a.C. Conocida por sus fértiles tierras agrícolas, de las que dependía su comercio, disponiendo de un puerto que podía albergar cien barcos. Los nativos la llamaban Ardabda, cuyo significado parece ser «siete dioses». La ciudad actualmente cuenta con unos 90.000 habitantes.
Fue durante siglos un activo centro comercial que entró en decadencia en el s. II, hasta que fue destruida por los hunos en el siglo IV. En tiempos del emperador Constantino VII a mediados del s. X ya no se menciona más a esta ciudad, quedando reducida a una aldea los siguientes 800 años. Como el resto de Crimea, fue conquistada por los mongoles en 1230.
En el siglo XIII comerciantes venecianos y genoveses establecieron en su territorio un floreciente establecimiento comercial llamado Caffa (o Kaffa), que monopolizó el comercio del área del Mar Negro y sirvió como principal puerto y centro administrativo de los asentamientos genoveses del litoral de este mar. Se convirtió en uno de los mayores mercados de esclavos de Europa.
En 1346, la epidemia europea de la peste negra estalló en Caffa. Los tártaros fueron los primeros en utilizar la peste como arma biológica ese mismo año: durante el asedio de Caffa, lanzaron los cuerpos de sus soldados muertos de peste por encima de las murallas de la ciudad. La ciudad se convirtió en centro comercial importante —el puerto podía albergar a no menos de 200 barcos— y contaba al final del siglo XV, con unos 70.000 habitantes, genoveses en un 80 por ciento lo que la hacía una ciudad relativamente importante.
En 1475, los genoveses debieron abandonar Caffa, y otras colonias y puertos del litoral, como Sudak, ante el avance de los otomanos, perdiendo así el control del Mar Negro. El control otomano cesó con la expansión del Imperio ruso, que conquistó Crimea en 1783. Fue renombrada Feodosiya en 1802, una versión rusa del antiguo nombre griego.
Actualmente la moderna Feodosia es una ciudad turística con una población de unos 90.000 habitantes, disfrutando de extensas playas, manantiales de agua y baños de barro, aparte de renombre debido a sus muchos sanatorios y casas de reposo así como ser la ciudad natal del famoso pintor Ivan Aivazovsky, descendiente de una familia armenia, Aivazian. Su talento como artista le valió el patrocinio de la Academia de Bellas Artes de San Petersburgo donde se graduó con medalla de oro.
En 1845, Aivazovsky fue a Estambul, a invitación del sultán Abdulmecit, una ciudad que iba a viajar un total de ocho veces entre 1845-1890 Durante su larga estancia en Estambul, Aivazovsky tuvo una serie de encargos como pintor de la corte, de los cuales treinta están actualmente en exhibición en el Palacio Imperial Otomano, de Dolmabahçe y muchos otros museos de Turquía. Sus obras también se encuentran en decenas de museos por toda Rusia y la ex repúblicas soviéticas, incluyendo el Museo del Hermitage en San Petersburgo , y sobre todo en la que en estos momentos más nos interesa: La Galería de Arte Aivazovsky en Feodosia con más de cuatrocientas obras del pintor.
Aivazovsky es sobre todo conocido por sus marinas, paisajes y escenas de la costa de gran formato. “El pintor del mar” como es conocido por rusos y ucranianos. Especialmente admirado por su técnica e imaginación en la representación de la luz sobre las olas y la espuma de mar y especialmente es su capacidad de representar la luz solar difusa y la de la luna, entre las nubes, o a través de una niebla, con capas casi transparentes de pintura. También pintó paisajes, incluyendo escenas de la vida campesina de Ucrania y la vida de la ciudad de Estambul. Aivazovsky se convirtió en el más prolífico pintor de Rusia ya que dejó más de 6.000 obras a su muerte en 1900. Los fondos obtenidos durante su exitosa carrera como artista le permitió abrir una escuela de arte y galería en su ciudad natal de Feodosia.
Desde 2006, las obras de Aivazovsky se ha revalorizado muchos enteros, alcanzando en subastas hasta 3.200.000 dólares, y su reputación internacional sigue creciendo. El 14 de junio de 2007, su pintura «Envío americano en la la Roca de Gibraltar» se vendió por 2.710.000 libras, el precio más alto pagado en subasta por una pintura de Aivazovsky.
Otros enlaces de interés relacionados con Crimea:
- http://misviajesporahi.es/category/pais/ucrania
- http://escalarencrimea.blogspot.com/
- http://ucraniabierta.blogspot.com/
Y hasta aquí nuestro viaje por Crimea. Espero hayas disfrutado leyendo estas páginas, y que en caso de búsqueda de información te sirva para poder organizar mejor tu viaje.
Animo a todos a conocer esta tierra encantadora. Sé que es un destino inusual, y no exento de complicaciones, pero quizá ahí radique parte de su atractivo.
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al Sur de un horizonte 